NUESTROS ORÍGENES

      La Congregación de Agustinas Misioneras es una rama de la Orden Agustiniana (O.S.A) que reconoce a San Agustín como Padre y Maestro y se acoge a su Regla y Espiritualidad. La espiritualidad de San Agustín constituye el primer factor del Carisma Congregacional, común a toda la familia agustiniana.

      Fue fundada en Madrid, España, el día 6 de mayo de 1890, por un grupo de tres mujeres sencillas, Agustinas Terciarias del Beaterio de San Agustín de Barcelona: Madres Querubina Samarra, Mónica Mujal y Clara Cantó, quienes conjugaban la serenidad contemplativa con el servicio docente.
      Remontándonos un poco más a los orígenes, en el año 1883, un grupo de Agustinas Terciarias del Beaterio de Barcelona, nos mostraron su audaz y voluntaria respuesta a una necesidad concreta de la Iglesia, asumiendo con ejemplar disponibilidad las misiones en el Archipiélago Filipino, para encargarse de la educación de las niñas huérfanas a causa de la peste del cólera.
     Unos años después, en 1890, Querubina, Mónica y Clara, se equiparon de incondicional disponibilidad y abandonaron su apacible retiro del Beaterio, para fundar un noviciado en Madrid con la finalidad principal de formar religiosas para ser enviadas como misioneras a Filipinas y poder dar atención a las huérfanas. Es así como nace la Congregación de Agustinas Misioneras cuando dicha comunidad, que además de la formación atendía un orfanato de niñas en aquel mismo lugar, fue canónicamente constituida, el día 6 de mayo de 1890.
     Somos una Congregación de vida apostólica. Profesamos seguir a Cristo en castidad, pobreza y obediencia, según la espiritualidad de San Agustín, expresada principalmente en la Regla y en nuestras Constituciones.

                                  LAS AGUSTINAS MISIONERAS LLEGAN A LEÓN

     Las Agustinas Misioneras comenzaron a extender su acción evangelizadora por medio de la educación en diversos lugares del mundo, y así llegan a nuestra ciudad de León.
    En Febrero de 1942, las Agustinas Misioneras solicitan al Obispo de León permiso para establecerse en la ciudad de León, aunque no lo harán definitivamente hasta 1943.El primer Colegio se abrirá en el término de la Parroquia de San José de las Ventas, en la C/ La Fábrica. Las Hermanas comienzan su tarea educativa con muchas dificultades por la falta de espacio y el aumento constante de niñas que desean ser recibidas. Ante esta demanda, las Hermanas Agustinas, consiguen el traslado en 1949 a otro local en la C/ Mariano Andrés nº 17, que igualmente se queda pequeño.
    Finalmente, en Septiembre de 1966 se abre el Colegio actual en la C/ San Juan de Prado nº 2 con 600 alumnas, una Residencia para Universitarias y un Internado para niñas cuyos Padres no residían en la capital leonesa. Son, por lo tanto casi 50 años de presencia educativa agustiniana en León.
    Hoy, como entonces, nos sentimos educadoras y colaboradoras de la labor evangelizadora que nos han legado San Agustín y nuestras Fundadoras, y hacemos de nuestra vida un servicio que ayude a los niños y jóvenes a acercarse a Jesús de Nazaret y su mensaje.

                       UN COLEGIO ACTUAL

      Muchos son los niños y niñas que se han educado en nuestras aulas, y hoy son personas de bien, padres y madres de familia, religiosos y religiosas, sacerdotes... Y todos ellos comparten una raíz cristiana y agustiniana que procede de su paso por nuestro Colegio.
      Aunque cada año asistimos con asombro a los muchos cambios pedagógicos y de todo tipo que se dan en nuestras aulas y en el sistema educativo en general, afrontamos con creatividad y renovada ilusión cada reto, intentando dar lo mejor de nosotras mismas, y ofreciendo un servicio educativo de calidad. Procuramos para nuestros profesores una formación contínua en muchos ámbitos, sobre todo el de los idiomas, las nuevas tecnologías y las últimas tendencias pedagógicas.